Cuentan en El Diario de Nunca Jamás (vía Meneame) que Internet Explorer 7 va a ser bueno. Podría serlo habida cuenta de las capturas que nos enseñan. Pero será a costa de otros, algo que no es la primera vez que ocurre en el mundo de la tecnología. Si no son rápidos, los creadores podrían no ser los que aprovechen un buen producto. Y es que lo que se venía anunciando desde que se advirtió que llegaría antes que Windows Vista, es una realidad en su nuevo interfaz:
IE ha aprendido, pero lo ha hecho copiando. No hay más que echar un pequeños vistazo a la estructura del programa para comprobar que es calcado al Firefox de Mozilla. Iconos más pequeños, navegación por pestañas, mayor superficie de visibilidad para webs, buscadores integrados, lector de feeds (...). Al igual que en Firefox existen las extensiones, aquí están los Add-ons y la posibilidad de añadir pequeños programitas al gusto del consumidor. Permitan que añada que ahora el borrado, tal y como leemos en el blog de IE, es muy parecido al de Firefox.
También habrá protección contra el phising pero la cuestión para el que haya dejado de usarlo, tal y como plantea la bitácora es, ¿le ponemos los cuernos a nuestro navegador favorito?.