Según publica el Financial Times, Microsoft está a punto de anunciar que los formatos de Office estarán disponibles para sus competidores, como parte de un movimiento que asegurará al gigante del software no perder cuota de mercado, sobre todo de administraciones públicas. De esta forma, los usuarios podrán abrir y trabajar en Word, PowerPoint y Excel sin tener que comprar el MS Office para hacerlo.
El paso no es casual. Ya Massachussetts avisó que no usaría Office y la Comisión de la UE ha dejado de usarlo para la creación de documentos públicos así como recomendó a los 25 miembros que hicieran lo mismo. Si además le sumamos el hecho de que muchos gobiernos, municipales o nacionales, estén optando por Linux con OpenOffice o Windows también con OpenOffice, tenemos la gota que ha colmado el vaso.
La compañía enviará su tecnología de formato de documento Office Open XML (Extensible Markup Language) a la Organización Internacional de Estándares (ISO) para que pueda ser adoptado como estándar internacional a tiempo para el lanzamiento de la próxima versión de su suite ofimática Office 12